Nuestros pequeños algunas veces han presentado problemas de infección viral o bacterianas, que han sido ocasionadas por el entorno en el que nos encontramos. Pero, ¿sabemos la diferencia entre ambas? En este artículo te lo explicaremos.
Álvaro Altamirano, director médico del Consultorio Médico Pediátrico y pediatra de Emergencia del Hospital Guillermo Almenara nos explica la definición de ambos.
a. ¿Qué es un virus?
Es un microorganismo que tiene en su núcleo una información genética, que está envuelta en una cápsula con una envoltura de lípidos, en este caso puede ser el coronavirus, y necesita una célula animal (como la que tenemos los humanos) para poder replicarse.
¿Qué particularidad tiene?
Inyecta este material genético que tiene en la célula, logrando que se reproduzca más células virales; es decir, se multiplica más de mil veces en nuestro organismo.
Por tal motivo, las infecciones virales tienen una condición propia de generar una invasión de estos microorganismos, llamados virus en el cuerpo, y hacer réplicas continuamente hasta infestar a las personas. Pueden producir lesiones o diversos síntomas en nuestro organismo.
El especialista recalca que la mayoría de infecciones en niños son virales como: la faringitis viral, papera, varicela, rubéola, hepatitis o rotavirus, que es la diarrea en los pequeños. Ello va depender de la edad, como en el caso de los niños.
¿Qué es una bacteria?
También es un microorganismo un poco más organizado. Es como una célula, ya que tiene una pared celular que la protege del medio ambiente, por ello es que puede vivir un poco más de tiempo que el virus, ya que aguanta al estar encapsulada en el ambiente.
En resumen, el virus se multiplica por millones y llega a replicarse sucesivamente. En cambio, si la bacteria llega a reproducirse rápido llega a generar una duplicación sin la necesidad de meterse a una célula, porque cuando ingresa al cuerpo empieza a dividirse.
Las infecciones bacterianas tienen que tener un foco de contagio, al igual que el virus. Por ejemplo, la diarrea por bacteria tiene que tener un foco contaminante como el haber ingerido una comida en las condiciones, logrando ingresar al organismo y liberar toxinas tales como la fiebre o dolores corporales.
El pediatra agrega que un virus respiratorio tiene una presentación frecuente, ya que empieza con los estornudos o dolor de garganta, y luego de dos o tres días pueden empezar con tos o fiebre, logrando estabilizarse en el organismo. En el caso de las bacterias, cuando se logran reproducir tienden a empezar con fiebre, teniendo como resultado que los padres lleven a sus hijos al hospital para que su pediatra pueda recetarles los medicamento o tomarles los exámenes correspondientes.
Finalmente, Altamirano recomienda que, para evitar infecciones virales o respiratorias, en nuestros pequeños debemos evitar:
- Estar al día en sus vacunas: Tenemos las del sarampión, rubéola, papera, hepatitis viral A, B, influenza, varicela, entre otros.
- Tener un espacio: Los padres deben tener un espacio con buena ventilación donde estén los niños.
- Higiene: Mantener una buena higiene como la enseñanza del lavado de manos durante veinte segundos.
- Buena alimentación: Debemos darles alimentos saludables como las verduras, frutas, menestras y carbohidratos.
- Consumo de vitamina C: Los pequeños deben consumir los cítricos como la naranja o suplementos vitamínicos para prevención de infecciones respiratorias virales.
Todo ello hará que disminuyan drásticamente las infecciones respiratorias y digestiva tanto virales como bacterianas, por ello aplicarlas nos ayudará a prevenir futuras enfermedades en nuestros hijos.