Redacción: Mishell Salazar
Los accidentes domésticos le suceden a cualquiera, pero los que más están expuestos son los niños. Ellos pueden sufrir caídas, intoxicaciones, quemaduras, golpes o heridas.
Los pequeños carecen de experiencias trágicas para prevenir el peligro y riesgo en casa. Aún no adopta hábitos cotidianos para protegerse de alguna emergencia. En los siguientes párrafos explicaremos algunos consejos para evitar riesgos.
Evitemos caídas:
Los padres deben mantener el suelo libre de objetos peligrosos.
Clausurar las superficies mojadas y resbaladizas.
Colocar pegatinas antideslizantes en el suelo del baño.
Las escaleras de la casa deben tener barandillas.
Tener ventanas con rejas.
Los muebles, como sillas, armarios cajas deben estar lejos de las ventanas.
Los pequeños no pueden subir a los muebles.
Evitemos electrocutarnos:
Los padres deben colocar enchufes giratorios o taparlos.
No dejar aparatos electrónicos mojados cerca del pequeño.
Evitemos quemaduras:
Tapar las sartenes mientras se estén utilizando.
Los mangos de las sartenes y cacerolas tienen que estar en dirección hacia las hornillas.
Los niños no deben estar cerca de la cocina y la zona de planchar.
No dejar que lo pequeños jueguen con fósforos.
Evitemos heridas:
Los cuchillos, tijeras, tenedores y objetos puntiagudos alejarlos de los bebés.
Recoger los platos que se rompan y limpiar bien la zona, ya que lo bebés gatean por la toda la casa.
Es mejor que las plantas estén fuera de la casa, ya que el pequeño las puede masticarlo.
Bloquear las puertas, ventanas y balcones.
Evitemos intoxicaciones:
Los medicamentos del hogar y el material de limpieza deben estar fuera del alcance del pequeño.
Cerrar bien la llave del gas de la cocina cuando no se utilice.
Los materiales de limpieza deben estar guardados en una zona bajo llave.
Cada vez que el bebé juegue en el patio de la casa observar que no coma pasto o tierra.