Los primeros dientes del bebé representan una alegría para mamá y papá, pero una molestia para el pequeño. Estos suelen aparecer tras cinco o seis meses del nacimiento. Es muy común que a los bebés babeen más de lo normal y que sus primeros dientes aparezcan en las encías inferiores.
Los primeros dientes en aparecer son los incisivos frontales inferiores. Un par de meses más tarde, brotan los cuatro incisivos superiores; y así sucesivamente. Cuando el pequeño cumpla los quince meses de nacimiento ya debería tener casi toda su dentadura de leche completa.
En este periodo, es natural que, además del excesivo babeo, las encías del bebé se hinchen, causándole dolor e irritación. Incluso hay algunos pequeños que pueden presentar fiebre o un pequeño aumento de la temperatura corporal. Además del dolor y las molestias, el bebé también puede presentar problemas para conciliar el sueño y tener menos apetito a la hora de ingerir alimentos.
La aparición de los primeros dientes puede generar que el bebé llore más de lo normal. La pediatra Meylin Li, coordinadora de la Sociedad Peruana de Pediatría brinda algunos consejos para aliviar estas molestias.
- Mantener el rostro del bebé siempre limpio y seco. El contacto de la baba con su piel puede causar eczemas (inflamación), sarpullidos e irritación.
- Frotar las encías del bebé con la yema de tus dedos para calmar el dolor que sienta el pequeño. Asegúrate que tu dedo esté limpio para no causar alguna posible infección en sus encías.
- Compra un mordedor de goma en alguna tienda para bebés. Esto lo ayudará a calmar la picazón que sienta por la aparición de sus primeros dientes.
- Ofrece a tu bebé algún alimento frío. Los líquidos o gelatinas suelen suavizar el dolor.
- Puedes aplicar un gel para encías. Consulta con el pediatra para escoger una solución tópica adecuada. En el caso que tu pequeño presente fiebre, consulta por algún medicamento.
Recuerda que tu bebé puede estar muy irritable durante este periodo. Lo más importante es que estés a su lado en todo momento y le brindes el cariño y comprensión suficiente para aliviar su dolor.