La lactosa es un tipo de azúcar que se encuentra generalmente en la leche de vaca, pero también se encuentran en otros productos lácteos como el queso, yogurt o mantequilla. Algunos bebés nacen con intolerancia a esto y en consecuencia pueden sufrir dolores de estómago, hinchazón, diarrea o náuseas.
¿Qué es la intolerancia a la lactosa?
Es una afección que puede presentar un organismo caracterizada por la hinchazón del abdomen, dolores estomacales o producción de gases. Generalmente los malestares se presentan entre los 30 y 120 minutos después de haber consumido el lácteo.
Desmintiendo mitos sobre la intolerancia a la lactosa
Mito: los productos de soya pueden ser buenos sustitutos de los lácteos
Verdad: el gastroenterólogo de Vidaintegra, David Kutz, comenta que si bien es cierto que los productos de soya contienen calcio, no quiere decir que proporcionen la misma cantidad que el lácteo. Una porción de leche de soya contiene 20 mg aproximadamente, mientras una taza de leche tiene 290 mg aproximadamente.
Mito: eliminar los lácteos de tu dieta es la mejor solución
Verdad: el especialista menciona que el cuerpo humano debe consumir diariamente tres porciones de productos lácteos. Si se trata de una persona intolerante a la lactosa, se recomienda el consumo de productos reducidos o con 0% de lactosa, dependiendo del grado de intolerancia.
Mito: los niños no sufren de intolerancia a la lactosa
Verdad: no es frecuente que los niños sufran de intolerancia a la lactosa, pero es posible. Incluso hay niños que nacen con problemas para ingerir alimentos lácteos. Kutz recomienda estar atentos si el pequeño tiene diarrea o hinchazón después de tomar la leche.
Mito: no existen grados de intolerancia a la lactosa
Verdad: el doctor Kutz menciona que algunas personas pueden tomar un vaso de leche sin problemas y otras presentan los síntomas desde el primer sorbo. Asimismo los síntomas no son los mismos en la niñez como en la etapa adulta.
Mito: los síntomas de la intolerancia a la lactosa no son similares a los del colon irritable
Verdad: síntomas como: dolor abdominal, hinchazón y diarrea podrían confundir sobre lo que uno está padeciendo. Por eso el especialista recomienda realizarse los exámenes correspondientes para tener un buen diagnóstico.
Sufrir de intolerancia a la lactosa no es grave. Existen muchas alternativas para no quitar los beneficios que te brindan estos productos.