Los primeros pasos de un bebé suelen causar mucha alegría en las madres y padres de familia, pues aprender a caminar representa todo un logro cuando el hijo es muy pequeño. Pero, ¿qué sucede si durante este proceso los papás notan que el niño tiene pie plano? En esta nota, te explicaremos más al respecto y qué hacer cuando ocurre una situación como esta.
Álvaro Altamirano, director médico del Consultorio Médico Pediátrico y pediatra de Emergencia del Hospital Guillermo Almenara, comenta que si hay sospecha de que el bebé tenga pie plano, es conveniente acudir al pediatra y si él determina que, en efecto, es así, luego de haber realizado una evaluación clínica y evaluar la marcha, el paciente será derivado al médico especialista en ortopedia y traumatología infantil. Este se encargará de analizar, de manera más detallada y profunda, la forma en la que el niño se para, se sienta, cómo camina y observar el rango de movimiento del pie.
En vista de que el pie plano, en ocasiones, está relacionado con problemas de la pierna, el doctor también examina la rodilla y la cadera.
Asimismo, el especialista señala que, por lo general, se realizan rayos X para determinar la gravedad de la deformación. A veces, se ordenan estudios adicionales de imagen diagnóstica y otro tipo de exámenes.
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¿QUÉ SÍNTOMAS PUEDEN PRESENTAR ALGUNOS NIÑOS?
- Dolor, sensibilidad o calambres en el pie, la pierna y la rodilla
- Inclinación del talón hacia afuera
- Torpeza o cambios en la forma de caminar
- Dificultades con los zapatos
- Energía reducida cuando participa en actividades físicas
- Retiro voluntario de actividades físicas
¿CUÁNTOS TIPOS DE PIE PLANO EXISTEN?
Pie plano flexible: tiene una estructura esquelética normal, pero muy flexible en sus articulaciones. Por ello, cuando el niño se para y apoya su peso, el puente se hunde y el talón se desvía hacia afuera. Sin embargo, cuando está de puntillas, vuelve a aparecer el puente y el talón se coloca corregido hacia adentro.
Altamirano menciona que el término flexible se refiere a la movilidad de las articulaciones del pie y su capacidad para corregir estos trastornos de alineación. Vale decir que es el tipo de pie más frecuente en los niños y se considera una situación normal durante los primeros años de vida.
Pie plano rígido: existen uniones anómalas entre los huesos del pie. Ello provoca una deformidad con menor altura del arco longitudinal. Cuando el niño se pone de puntillas, la postura del pie no cambia debido a que la movilidad está bloqueada por la unión entre los huesos.
Es importante remarcar que este tipo de pie necesita evaluación médica, porque el niño puede presentar dolor al caminar. Después de la prueba, se lleva a cabo una terapia para mejorar la musculatura o, si está muy contracturada, para relajar la contracción de los músculos que están siendo afectados y produzcan malestar.
El doctor enfatiza en que no se les opera. Solo un pequeño porcentaje lo hace. Por otro lado, señala que el uso de plantillas en un niño de uno o dos años es un poco complicado, pues a veces no lo toleran. Lo ideal para que comience a caminar es que lo haga descalzo, o con medias antideslizantes.
Los primeros meses al caminar es de puntitas y, luego de haber asentado el talón, empieza a tener más tono muscular en el pie y piernas y, con el pasar de los años, se dibujará el arco plantar.

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¿CÓMO SE FORMA EL ARCO LONGITUDINAL DEL PIE?
El especialista sostiene que se desarrolla de forma progresiva, los primeros años de vida, de modo que alcanza su máxima altura hacia la adolescencia.
Cabe recalcar que durante los dos o tres años iniciales, el pie del niño tiene una apariencia de pie plano. Esto viene condicionado por su gran elasticidad y por el acúmulo de tejido adiposo en la zona interna de la planta del pie.
A partir de los cinco años, el arco se observa y seguirá aumentando de manera progresiva. Por lo general, las mujeres suelen tener el arco un poco más pronunciado que los varones. Hasta un 20% de la población no llega nunca a desarrollar un arco longitudinal claro y presenta durante toda la vida unos pies planos flexibles indoloros y funcionales.
¿QUÉ RECOMENDACIONES SE DEBEN TOMAR EN CUENTA SI EL NIÑO TIENE PIE PLANO?
El doctor opina que, en general, el pie plano flexible no requiere tratamiento, ya que se trata de pies normales que evolucionarán espontáneamente hacia una mejoría de la alineación. Asimismo, hace hincapié en que el arco plantar aparecerá entre los tres a cinco años. Para que este se presente, conviene estimular el desarrollo de la musculatura propia del pie mediante ejercicios como caminar de puntillas o descalzo por casa.
Se debe evitar el uso de calzado rígido, porque no permite una adecuada formación del pie y no se recomienda el uso de plantillas a tan corta edad.
Además, el pediatra afirma que, por lo general, solo se opta por la corrección quirúrgica en casos extremos, generalmente asociados a otros trastornos óseos y en pies dolorosos o con una deformidad progresiva.
En casos de pie plano rígido por uniones óseas anómalas, si es poco sintomático, suele ser suficiente con un tratamiento rehabilitador que revierta la contractura de la musculatura peronea. Si existen esguinces muy repetidos o dolor que no cede con este proceso, se ha de plantear una cirugía.