Una de las primeras cosas que miran los padres cuando ven por primera vez a su bebé son los ojos. Algunos niños tienen distintos colores como los: azules, verdes, pardos, negros, marrones, entre otros y, con el tiempo suelen cambiar. En esta nota te enseñaremos por qué tu hijo tiene un color diferente al que tenía cuando nació.
El pediatra Álvaro Altamirano, director médico del Consultorio Médico Pediátrico, señala que el color de los ojos se define por unas células que están dentro del iris, que son los melanocitos, estos suelen protegernos de los rayos solares. Se producen por la pigmentación de la piel, así como también el de los ojos.
Cuando hay muchos melanocitos se producen bastante melanina (principal pigmento del color de la piel y coloración de los ojos). Por eso, cuando uno es de tez morena bota más melanina; por lo tanto, la piel es oscura y el color de los ojos también es oscuro, puede ser negro o marrón.
En el caso, de que la piel sea más clara, produce menos melanocitos y se tienen menos melanina. El color de los ojos suelen ser claros y pueden ser verdes o celestes.
Cuando un niño nace y se produce un cambio en el color de sus ojos, esto significa que aún no tiene un color definido.
Este cambio se puede apreciar a partir de los seis meses hasta su primer año de nacido, antes puede cambiar. Por ello, muchas veces pueden nacer con los ojos claros y posteriormente se van oscureciendo. Las madres no deben temer este cambio, pues es normal.
Pero, ¿por qué se produce esta alteración en los bebés? Suelen cambiar de color porque los melanocitos conforme el niño va creciendo, se van activando y produciendo cada vez la melanina.
Por otro lado, el pediatra señala que las madres no deben emocionarse cuando sus hijos nacen con los ojos claros, pues esto puede tornar otro color. Sin embargo, debemos mencionar que lo que activa a los melanocitos es la exposición al sol.
