El consumir tabaco es perjudicial para la salud de quienes rodean al fumador, especialmente para las mujeres embarazadas y los niños. Las personas vulnerables inhalan estas sustancias tóxicas que pueden ser perjudiciales para la salud y aunque no sean fumadores, esto puede empeorar. Por ello, en este artículo te contaremos más.
La psicóloga infantil Jesica Kuwae, también directora del centro Crianza Danza, comenta que al hablar de tabaquismo pasivo nos referimos a la exposición de las personas ante la conducta fumadora de alguien. En este caso, los niños comparten el espacio físico y las actividades con sus padres u otros familiares en casa, que si ellos fuman, pues esto también influyen en ellos.
EL TABACO EN LOS NIÑOS
Los niños son los más perjudicados por el humo del tabaco, ya que no pueden evitarlo, de forma voluntaria, la exposición al mismo.
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¿QUÉ OCURRE EN EL ASPECTO PSICOLÓGICO?
Tal vez, no es algún comportamiento o actitud claramente observable o que aparece de improviso. Lo principal sería la naturalización del acto de fumar, al ver que lo realizan personas significativas y con regular frecuencia, ellos lo entienden como una acción adecuada que pueden asimilar e imitar.
¿CUÁLES SON LOS RIESGOS DEL TABAQUISMO PASIVO EN LOS NIÑOS?
La experta recalca que las implicaciones en la salud referidas al tabaquismo, podría ser suficiente para mencionar. Sin embargo, el fumar es un hábito, que tal vez se relacione con un comportamiento adictivo (que escapa al control de la persona que lo realiza y que se establece como una necesidad). Es decir, que no es algo que buscamos proponer a los niños como un comportamiento deseado.
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CONSEJOS PARA LOS PADRES DE FAMILIA
Kuwae recomienda que no debemos exponer a nuestros hijos. Si en casa alguno de los padres o familiares son fumadores, tienen que tener reglas muy claras de convivencia para que en los espacios donde están los niños, estén libres de humo y no tengan enfermedades respiratorias.
