¿Te gusta el ají y los alimentos picantes? ¿Tratas de evitar su uso porque estás embarazada? o ¿sabes si el rocoto le hace daño a tu bebé? En este artículo te ayudaremos a seleccionar los nutrientes deseados durante y después de tu embarazo. También, si las comidas picantes lastiman a tu hijo.
La obstetra Jane Garay Mosquito, especialista en temas de psicoprofilaxis y asesora en lactancia materna, señala que a la madre le afecta comer picante en sus platos, porque cuando ingiere ají o algún condimento, ocasiona que la madre sufra de acidez, su útero, estómago, digestión sea mucha más grande y lenta.
En el caso que la mamita esté acostumbrada a comer picante, ya sea desde antes o después de su embarazo, debe evitarse. Pero, ¿afecta a mi bebé? La experta señala que puede incomodar este tipo de comidas por el sabor, ruidos hidroaéreos (ruidos intestinales) o por algún malestar estomacal. Indirectamente sí afecta al bebé.
Si bien puede que al ingerir picantes no ocurra nada malo, es mejor no arriesgarse. Las consecuencias de esto pueden ser: acidez, gastritis o regurgitaciones (reflujo gastroesofágico).
Se recomienda que las comidas o los alimentos que ingieran las mamás sea dependiendo los meses de gestación. Igualmente, se debe evitar consumir alcohol, café, medicamentos no indicados por su especialista, comidas picantes o gaseosas.