Si queremos inculcar a nuestros hijos una alimentación saludable para toda la vida, lo mejor es hacerla desde pequeños. El momento en que el bebé empieza con la alimentación complementaria, debe consumir e ingerir sus primeras comidas libres de sal y azúcar. Por ello, en este artículo te contamos más.
Karen Juliana Pacheco Valdivia, nutricionista con especialización en Bromatología y Nutrición, con un Diplomado en Nutrición Pediátrica y directora en “Nutrika – Nutrición Huacho”, comenta que, los bebés y niños no deben consumir excesivas cantidades de sal o azúcar en sus comidas, ya que puede alterar su sistema renal o incluso sufrir de obesidad infantil.
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¿SE PUEDE AÑADIR SAL O AZÚCAR EN LA COMIDA DE LOS BEBÉS?
La experta comenta que no se recomienda utilizar sal en las preparaciones del bebé a menos no antes del año. La recomendación de la OMS (Organización Mundial de la Salud) es limitar la ingesta de sal a menos de 5 g/día (2 g de sodio), esto es aplicable para adultos y niños por encima de los 2 años.
En cuanto al azúcar, se recomienda no usarlo antes del año, sobre todo en bebés con elevado peso para su edad. El azúcar es muy perjudicial para la salud y su consumo excesivo puede causar complicaciones tan graves como obesidad, diabetes, caries, entre otros.
Por eso, es mejor que no le des azúcar a tu bebé antes del año y que, pasada esa edad, lo límites lo más posible.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE QUE NO LOS INGIERAN?
Pacheco, señala que el sistema renal de los bebés es aún inmaduro para procesar grandes cantidades de sodio, así que no hay que agregar nada de sal en su comida cuando se empieza a introducir la alimentación complementaria.
Si un bebé consume demasiado azúcar, también su consumo calórico total será superior al que gasta durante el día, lo que provocará que este se almacene en forma de grasa y así el bebé aumentará de peso en exceso.
PRINCIPALES PROBLEMAS DEL CONSUMO EXCESIVO
- Un exceso de sodio en la sangre favorece la aparición de hipertensión y aumenta el riesgo de problemas cardiovasculares. Por lo tanto, cuanta menos sal se añada a las comidas de los bebés, mejor.
- Cuando le brindamos al bebé muchos azúcares refinados (procesados) estos tienen algún efecto en la actividad de los niños, porque estos azúcares que son los carbohidratos ingresan al torrente sanguíneo rápidamente. Por ello, se producen cambios rápidos en los niveles de azúcar en la sangre. Esto puede hacer que un niño se vuelva más activo.
- El elevado consumo de azúcares en el bebé conlleva a que este aumente de peso, logrando tener sobrepeso u obesidad y con el tiempo problemas como la diabetes infantil hasta caries dental.
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¿QUÉ ALIMENTOS ORIGINALMENTE YA CONTIENEN SODIO Y AZÚCAR?
La nutricionista añade que ya es suficiente con los azúcares naturales de los alimentos, la lactosa de la leche y los azúcares de las frutas. Además, es suficiente con los vegetales y tubérculos dentro de su composición, ya que contiene sodio.
RECOMENDACIONES PARA LOS PAPITOS
La especialista nos deja cuatro recomendaciones que debemos tener en cuenta a la hora de alimentar a nuestros bebés, las cuales son:
- Recuerden papitos este dato: La función renal del recién nacido es un 25% del adulto y para los 6 meses de edad, ya tiene 75 – 80% de su funcionalidad. Sin embargo, es importante continuar protegiéndolo de altas cargas de sales.
- Asimismo, los bebés no tienen una predilección especial por el sabor salado, que en cambio, sí constituye un hábito inducido por los adultos, que ya somos incapaces de apreciar los sabores delicados.
- No hace falta renunciar completamente al sodio, sino moderar un poco; por ejemplo, evitando, dentro de lo posible, el consumo de aperitivos salados y embutidos, para activar los mecanismos naturales de compensación que permiten soportar un leve exceso sin daños.
- Les comparto unos tips para que mejoren el sabor a las comidas de sus bebés, es que en sus preparaciones usen ajo, cebolla, culantro, perejil, hierbas aromáticas como: albahaca, orégano, tomillo, entre otras. Estos aliños naturales ayudan a realzar el sabor natural de los alimentos y convertirlos muy apetecibles para tu bebé.